Un punto de vista diferente
Aunque ya paso como un mes después de Semana Santa, aun así quería compartir algo relacionado con el tema que cambio mi perspectiva:
Yo estaba acosta en el sillón de la sala viendo la televisión cuando mi mama llego y agarro el control remoto y sintonizó un canal religioso nacional, en él estaban transmitiendo una sección del programa que es la reflexión de el evangelio del día a cargo de un padre, realmente yo no tenia muchas ganas de escucharlo, pero aun así me quede para ver que era lo que iba a decir, el evangelio de ese día decía así:
María Magdalena estaba llorando afuera, cerca del sepulcro. Mientras lloraba se agacho sobre el sepulcro, y vio a dos ángeles de blanco, sentados, uno a la cabecera y el otro a los pies, en donde había estado el cuerpo de Jesús. Ellos le dijeron: “Mujer, ¿Por qué lloras?” Les respondió: “Porque se han llevado a mi Señor, y no sé donde, lo han puesto.” Al decir esto miro por detrás y vio a Jesús de pie, pero no le reconoció. Le dijo Jesús: “Mujer, ¿Por qué lloras?, ¿a quien buscas?” Ella, creyendo que seria el cuidador del huerto, le contesto: “Señor, si tu lo has sacado, dime donde lo pusiste y yo me lo llevare”. Jesús le dijo: “María”. Entonces ella se dio vuelta y le dijo: “Rabboní”, que en hebreo significa “maestro mío”. “Suéltame, le dijo Jesús, pues aun no he vuelto donde mi Padre: anda a decirles a mis hermanos que subo donde mi Padre, que es Padre de ustedes; donde mi Dios, que es Dios de ustedes”.
(Juan
20, 11-18)
Lo que me llamo la atención fue que el Padre que hizo la reflexión le dio un punto de vista diferente al que yo siempre había escuchado que le daban a esa lectura, él dijo: que muchas veces estamos tan sumergidos en nuestro dolor que aunque le estemos pidiendo a Dios que se haga presente y que nos ayude no le reconocemos, muchas veces de alguna manera aunque no nos demos cuenta, nos acostumbramos a permanecer en dolor, lo que nos ciega nuestros ojos para poder ver al Dios verdadero que esta a nuestro lado, ese Dios que siempre a estado allí pero que no lo reconocemos. También dijo algo muy importante: que a medida que fuéramos tratando de no sumergirnos tanto en el dolor y reconociéramos a Dios también íbamos a poder reconocer a nuestro prójimo y poder ver el dolor de él y ayudarlo a reconocer también a Jesucristo y así ir cambando a los demás enseñándoles que nunca deben de sentirse abandonados porque realmente nunca lo están.
Estaba buscando un video con la canción “Huellas en la arena”,
que te hace reflexionar y darte cuenta que aun en los momentos mas difíciles tu
no estas solo, cuando me tope con este video, como veras el titulo dice: reflexión
para cuando estés triste, pero no solo
cuando estés triste sino también cada vez que puedas y que quieras recordar
todo lo maravilloso que tienes por ÉL.
Reflexión
para cuando estés triste